Reza un proverbio vikingo que en la sauna se evapora hasta la ira. Y es que este medio de relajación ofrece incontables ventajas: desintoxica la piel, purifica el organismo, dilata los bronquios, regula la presión sanguínea, mejora el ritmo cardíaco y circulatorio. Además de eso, relaja la musculatura, limpia y desobstruye las vías respiratorias, desintoxica y expulsa las impurezas del organismo y combate enfermedades del aparato respiratorio.
El organismo al ser sometido a calor, acelera sus funciones metabólicas: aumentando la ventilación, acelerando la circulación sanguínea y estimulando los sistemas nerviosos y hormonales, lo que produce una mejora general de la salud. Al lograr una mayor oxigenación, se revitalizan los tejidos, ayudando a retardar el proceso de envejecimiento de la piel, dejando la piel lisa y aterciopelada.
Los pies asumen la carga de todoe l cuerpo. La exposición a estas situaciones hacen que los pies terminen secos, ásperos, casposos y sensibles. Duelen, se hinchan y emiten un sentimiento de malestar en todo el cuerpo. Un baño de pies sencillo con un cuidado posterior tiene un efecto estimulante y relajante sobre los pies. En sentido contrario, un baño de chorros de agua para los pies es fatigoso pero tiene un efecto de armonía sobre todo el cuerpo que experimenta un sentimiento agradable y cálido.
La combinación de aire y agua es un placer para el cuerpo y un regalo para la salud. Existe una gran diversidad de equipos que incorporan varios tipos de masaje. Según la temperatura del agua el efecto es relajante o tonificante. Todos ellos basan su filosofía en tratamientos que producenbienestar, relajación, equilibran el cuerpo y la mente y, a la vez, mejoran la apariencia.
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